La
investigación fundamental no orientada
(o investigación científica)corresponde a la
Consejería de Educación.
Entre los instrumentos utilizados para el apoyo a la investigación fundamental caben señalar las subvenciones de apoyo al programa de proyectos de investigación, las ayudas para financiar la contratación predoctoral de personal investigador, las inversiones en infraestructuras y equipamiento científico en las universidades públicas de Castilla y León financiadas con fondos FEDER o las aportaciones a centros de investigación de Castilla y León.
La
investigación sanitaria
es competencia de la
Consejería de Sanidad.
En el ámbito de la investigación biomédica destacan además de la actividad investigadora llevada a cabo en los centros de investigación, los institutos y los hospitales, actuaciones como las ayudas para la realización de proyectos de investigación en biomedicina, gestión sanitaria y atención socio sanitaria y las ayudas para proyectos de investigación en biomedicina a desarrollar en los centros de la Gerencia Regional de Salud de Castilla y León. Asimismo a través de convenios con el
Instituto de Salud Carlos III
la Consejería de Sanidad promueve acciones para la contratación, estabilización e intensificación de investigadores.
La
investigación agraria
y alimentaria se apoya, además, desde la
Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural.
Los proyectos de investigación relacionados con el sector agroalimentario en Castilla y León se abordan desde el
ITACYL
. El apoyo a la I+D+I se concreta en actuaciones como la prestación de servicios de asesoramiento tecnológico demandados por las empresas, la participación en proyectos de los programas de I+D de la Unión Europea o en diferentes plataformas tecnológicas relacionadas con el sector.
La
investigación sobre patrimonio cultural
es responsabilidad de la
Consejería de Cultura, Turismo y Deporte.
Entre las acciones llevadas a cabo destacan la participación en proyectos de los programas de I+D de la Unión Europea y en diferentes plataformas tecnológicas relacionadas con el sector, campañas de investigación en la Sierra de Atapuerca o el impulso de equipos multidisciplinares de investigación que trabajen sobre yacimientos arqueológicos de Castilla y León.